jueves, 8 de marzo de 2007

“Con este vendaval fenicio no sería raro que a la catedral la transformaran en un Shopping”

Era un día gris de atmósfera pesada, símil a las jornadas de esta semana en las que hay que realizar grandes esfuerzos para respirar. Una tarde triste, melancólica y húmeda, tan húmeda y densa como la historia y hacia allí se dirigían mis pasos. Caminé hasta llegar a la morada de aquel hombre desconfiado pero muy hospitalario.
Llegué a su casa siguiendo las recomendaciones que él me había apuntado por teléfono, toqué la puerta y la voz penetrante y robusta de Efraín Bischoff inquirió:

¿Quien es?

Soy Juan, el muchacho que habló con usted por teléfono para hacerle una entrevista.

Pasa… No traerás nada extraño en esa mochila, siempre empiezan haciéndose los amables y después sacan un arma.

¡No, por favor! Lo más dañino que traigo en la mochila es el grabador (en ocasiones puede convertirse en un arma letal). Mucho gusto.

Mucho gusto… ¿es la primera vez que venís a mi casa?

Sí, nunca estuve acá.

Era un ambiente chico, calido y rebalsado de libros. Torres de estos rodeaban el escritorio y entre las miles de hojas que formaban una gran muralla se colaba una débil luz amarillenta que iluminaba una vieja maquina de escribir Olivetti.

Esa es mi maquina, un fierro, tengo una computadora; ahí esta tirada, no se como usarla pero no me importa yo me manejo bien con lo que tengo.

La computadora residía en un rincón de la sala, tapada de tierra y libros, los que seguramente estarían contentos por aplastar a aquel fenómeno digital que tanto esta revolucionando las comunicaciones de nuestros días.

La idea era hacerle una entrevista a usted como personalidad importante de Córdoba.

No. Lo peor que le puede pasar a un tipo es creerse importante.

Yo no digo que usted se crea, pero usted es una personalidad reconocida en Córdoba.

Uf!!! Yo me recibí de bachiller en 1935. Después se acabaron todos los titulos.

Pero usted es un profesor destacado, ha escrito libros.

Sí, he escrito entre libros y folletos más de trescientositantos (sic) titulos, 44 obras de teatro y casi 90 novelas de radio.
Ahora yo, mi experiencia personal, nosotros vinimos de La Plata (yo nací allá en 1912) y en el año 21 vinimos a Córdoba y de Córdoba mi padre que había sido mecánico, consiguió, no se como, la representación de las maquinas Singer y entonces fuimos a residir en Cruz del Eje. Él tenía como zona de venta Dean Funes, Capilla del Monte, Serrezuela, Paso Viejo, Soto.
Ahora yo recuerdo, que en esos 8 años que mi padre fue representante de la Singer, él se metió en la política y yo recuerdo como ponía en un Ford cuatro maquinas ya armadas e íbamos a Paso Viejo, a Soto; hasta el año 28 que la Singer le sacó el trabajo y le dijo "o se dedica a la política o se dedica a esto" y lo echaron. Después lo nombraron jefe del registro civil de Cruz del Eje y vino la revolución del 30, también, lo despidieron.
Y fue así como vinimos a vivir a Córdoba, estuvimos poco tiempo acá en Alta Córdoba y después nos fuimos allá a la calle Alvear.

De Córdoba Ciudad ¿cuales son los lugares históricos que usted considera más importantes?

Córdoba tuvo su primer barrio en lo que hoy sería Güemes (Pueblo Nuevo, 1862). Donde está el Paseo de las artes, esa era la plaza de carretas, se diseñó en 1862 y pasando la Cañada para arriba esta Observatorio (Abrojal), pero este es más nuevo porque se inauguro en el 71. En el 69 se diseñó General Paz, en el 70 se diseñó San vicente.
Pero el centro evidentemente es el lugar histórico más importante porque fue donde se enclavó el jalón fundacional, digamos, se trasladó el jalón fundacional porque el lugar original de la fundación de la ciudad está en barrio Yapeyu, donde hay un pequeño monumento. El centro tiene gran importancia… pero aquí, con este vendaval fenicio nada sería raro que a la catedral la transformaran en un Shopping.

¡Dios nos libre!

¡Dios nos libre! Pero… Pero ¡Es terrible! Imaginese, al Palacio Ferreyra lo están volteando.

Dicen que lo están remodelando.

¡Pero son mentiras! Yo le voy a contar: en el año 69 vino a ser interventor de la provincia de Córdoba el comodoro Roberto Huerta y el ministro de educación y cultura vino a ser el profesor Penaglia de Rió Cuarto, él sabía que era por pocos días, porque un pariente de Huerta, que fue el profesor Víctor Barrionuevo Iponti, había sido designado en ese lugar.
A Víctor Barrionuevo yo lo conocía de antes porque era historiador, había estado en Río Cuarto y entonces me fue a buscar al diario Los Principios y me vino a pedir que fuera Subsecretario de Cultura.
En aquel tiempo los Ferreyra habían resuelto vender el palacio y se lo ofrecieron a Huerta. Huerta, luego, lo llamó a Barrionuevo, Barrionuevo a mí y nos dijo que visitáramos al palacio y lo vimos tres veces; ¡no le puedo decir lo impresionante que era eso! En la planta baja y en el planta alta donde estaban los dormitorios, el salón comedor con una mesa impresionante. Y Huerta dijo "ahí no hay que tocar nada", sólo en la parte de arriba que abría que restaurar los techos; y ahí íbamos a establecer el museo de arte contemporáneo. Después Huerta dejó el gobierno y todo se fue diluyendo.
Además en el palacio se filmó en 1915 la primer película de largometraje muda del interior del país, una parte de la película. La película se llama "Deuda Sagrada" y en ella actuó Rosita Ferreyra.

Usted tuvo un pasado muy ligado a los medios de comunicación.

Lo que pasa es que yo entré como colaborador del diario Los Principios en el año 1945. Yo entré en el último escalón… a corrector de pruebas. El diario se cerraba a la una de la mañana y el último tranvía para Alta Córdoba, yo vivía en la calle Rodríguez Peña, pasaba a las 12:30 de la noche; entonces de a pie me volvía con un linotipista por la avenida Velez Sarfield, General Paz, Jeronimo Luis de Cabrera; y él se quedaba en la avenida Fragueiro y yo seguía, caminábamos como 35 minutos.
Dos años y medio trabajando así y después me pasaron a la tarde. Yo trabajaba en la radio, en LV3, como recitador, desde el 31 hasta fines del 33. En el 32 escribí los primeros radioteatros y después pase a LV2, donde yo había ido a hacer un recitado, cuando el lugar de transmisión era un cuartito frente a la radio y recité "La Ballenera".
Ya en el 40 me casé y deje el radioteatro, en el diario seguí esta el 83.

¿Cual es el lugar que más le gusta de la ciudad de Córdoba?

El centro, por lo que representa, las iglesias, la Plaza San Martín. La estatua de esa plaza se inauguró en 1916 con motivo del centenario y es reproducción de la que está en la misma plaza de Buenos Aires.
El centro es el lugar que tiene más emoción.

Por último ¿Hay algo que distinga a los cordobeses?

Córdoba ha sido el centro de una serie de apetencias, de triunfos y de fracasos nacionales. ¡Centro! por eso es que tenemos los contagios de la demás provincias. Si usted ve, el tango es de Buenos Aires, la zamba del norte; pero algo típico de Córdoba… y después ha servido mucho para la inmigración.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Excelente! Que buena nota! Que ¨lujo¨ Juan! Te envidio! (en el buen sentido de la palabra) y te agradezco, de otra forma no creo que muchos de los que entramos a tu blog tuviéramos acceso a tan célebre personaje de Córdoba.
Felicitaciones!!

Jopi dijo...

Buenísima la entrevista, Juan. Más allá de lo debatible de su última respuesta, el tipo es una institución en Córdoba. Excelente post.

guadis! dijo...

Este blog se va para arriba!! Excelente! Aunque este señor no me caía tan simpático cuando leíamos sus apuntes para Historia en la facu, jeje!!

Juan Manuel Bruñol Silvani dijo...

Excelente la entrevista.
Realmente me dio sana envidia el modo, las preguntas y me interesó mucho de una ciudad que conozco demasiado poco.

Abrazo Rockero

Virgilio dijo...

Muy buena nota - quizá este historiador de Córdoba, que además trabajó tanto tiempo en Los Principios pueda decirme en qué año/años estuvo Carlos Juvenal allí, creo que como Director