La música transforma los espacios, nos traslada a otras dimensiones, muestra nuestra esencia y es allí donde los colores resaltan y vemos todo de otra forma… hasta lo que para nosotros es banal y cotidiano.
Un cuarteto de cuerdas y un teclado demuestran como esto es posible hasta en los lugares donde la gente camina enfrascada de cotidianeidad sin un minuto para apreciar lo que nos rodea.
sábado, 17 de febrero de 2007
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1 comentario:
Bien por la vuelta y bien por subir nuevamente los posts anterioes. A ver si esta vez te dejan laburar en paz.
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